No se trata del cuerpo grasoso que conocemos como jabón. Los términos hebreos «bor» y «borith» (lo que limpia) denotan un álcali.
Era empleado para lavarse (Jb. 9:30; Jer. 2:22), para limpiar las vestimentas (Mal. 3:2) y para fundir los minerales (Is. 1:25).
Las versiones gr. optaron por usar el nombre de una sustancia extraída de un vegetal, «poa», hierba, planta herbácea.
En Palestina se emplea la raíz de saponaria («Saponaria officinalis») para lavar los tejidos, porque con ella no se encogen.
El álcali que se usaba por la fusión de metales se obtenía de las cenizas de dos variedades de saponaria («Salicorn¡a fructicosa» y «Salsola kali»).
Todavía en la actualidad son reducidas a cenizas para obtener sosa.