«Jehová es eterno, sincero».
(a) Hijo menor de Gedeón. Sus setenta hermanos (su padre era polígamo) fueron asesinados por Abimelec, su medio hermano. Jotam escapó, fue al monte Gerizim, y maldijo la usurpación con una fábula contra las gentes de Siquem que se hallaban en el valle y contra el mismo Abimelec (Jue. 9:1-21). Esta maldición se cumplió con la destrucción de Siquem por parte de Abimelec y la muerte de Abimelec en Tebes (Jue. 9:22-57).
(b) Rey de Judá, compartió el trono con Uzías su padre, llamado también Azarías (750-739 a.C.), el cual había caído víctima de la lepra (2 R. 15:5, véase UZÍAS). Su regencia comenzó durante el reinado de Jeroboam II en Israel (1 Cr. 5:17). Esta simultaneidad se confirma si el temblor de tierra sucedió en la época de Uzías y de Jeroboam II (Am. 1:1; Zac. 14:5), y si se produjo en el momento en que Uzías se quería apoderar del sacerdocio, o poco después (Ant. 9:10, 4). Jotam obedeció a Jehová, aunque dejó subsistir la adoración en los lugares altos donde el pueblo se daba a la idolatría. Efectuó obras en el Templo, amplió las fortificaciones, y edificó ciudades de Judá, y una red de castillos y torres, aplastando a los amonitas y haciéndolos tributarios. Durante los dieciséis años de su reinado, Isaías y Oseas siguieron ejerciendo su ministerio (Is. 1:1). Hacia el final de su reinado los israelitas del norte y los sirios invadieron Judá. Murió a los 41 años de edad, siendo sucedido por su hijo Acaz (véase ACAZ).