(ac.: «Sin [dios lunar] ha dado la vida»).
Influyente samaritano (Neh. 2:10), llamado horonita, lo que no parece significar que procediera de Horonaim, ciudad de Moab, sino de Bet-horón (cfr. Neh. 4:2; 6:2). Se opuso a que Nehemías reconstruyera los muros de Jerusalén, pero no consiguió sus propósitos (Neh. 4:7-8). Sanbalat y sus cómplices solicitaron una entrevista con Nehemías, a quien querían asesinar (Neh. 6:1-4). Habiendo rehusado Nehemías entrevistarse con ellos, intentaron en vano intimidarlo, acusándolo de sedición (Neh. 6:5-14).
Sanbalat el horonita fue contemporáneo del sumo sacerdote Eliasib, que fue bisabuelo de Jadúa. Sanbalat se asoció con Tobías el amonita y se opuso a Nehemías en el año vigésimo de Artajerjes (Neh. 3:1; 4:7). Fue gobernador de Samaria poco antes del año 407 a.C., en el año decimoséptimo de Darío Noto (Papiros de Elefantina). Un hijo de Joiada (que era hijo del sumo sacerdote Eliasib) se casó con una hija de Sanbalat. Nehemías lo castigó excluyéndolo del sacerdocio (Neh. 13:4, 28). Josefo menciona a un Sanbalat, nativo de Cuta, que Darío, último rey de Persia (336 / 5 - 331 a.C.), envió a Samaria como gobernador Cuando Darío cayó, este Sanbalat dio su apoyo a Alejandro Magno en el año 331 a.C. Su hija Nicaso fue dada como esposa a Manasés, hermano del sumo sacerdote Jadúa. Este matrimonio con una mujer extranjera fue mal visto por las autoridades judías que expulsaron a Manasés del Templo de Jerusalén. Sanbalat, con el consentimiento de Alejandro, erigió entonces un templo sobre el monte Gerizim, e hizo de su yerno el sumo sacerdote de este santuario (Ant. 11:7, 2; 8:2 y 4). Estas declaraciones de Josefo no concuerdan bien con los datos bíblicos acerca de Sanbalat. Los antiguos comentaristas pensaban que Josefo hablaba de algún Sanbalat posterior. Pero Josefo enlaza el Sanbalat horonita con el casamiento de Neh. 13:28. Es muy probable que el historiador judío situara a Sanbalat 100 años más tarde para hacer ajustar los hechos con su opinión de que el yerno de Sanbalat no sólo había fundado o desarrollado la religión de los samaritanos, sino que también había fundado el templo de Gerizim. Josefo creía que este templo había sido erigido tras la conquista de Alejandro (Ant. 13:9, 1), unos dos siglos antes del año 128 a.C., y que el sumo sacerdote Jadúa y Alejandro Magno habían sido contemporáneos (Ant. 11:8, 5). Josefo comete un error de fecha (que desde luego no es el único) situando la misión de Nehemías en el año 25 de Jerjes (que sólo reinó 21 años, Ant. 11:5, 7), en lugar de situarla en el año 20 de Artajerjes, su sucesor (Neh. 2:1). Y a la llegada de Esdras a Jerusalén le asigna la fecha del año 7 de Jerjes (Ant. 11:5, 2), en lugar de situar esta fecha 21 años más tarde, en el año 7 de Artajerjes (Esd. 7:1, 8). Por último, confunde a Onías I con Onías III, que vivió un siglo más tarde (1 Mac. 12:7, 20; Ant. 12:4, 10).