Ideas que se presentan mientras una persona está dormida; pueden clasificarse de la siguiente manera:
- (a) sueños carentes de importancia espiritual (
Jb. 20:8 ;Sal. 73:20 ;Is. 29:8 ). - (b) Sueños que Dios emplea para Sus propósitos. Al suscitarlos, Dios obra mediante las leyes de la mente, y puede usar causas secundarias. Estos sueños pueden influir en la vida espiritual de las personas.
El sueño de un madianita desmoralizó al enemigo y alentó a Gedeón, que lo llegó a conocer de una manera providencial (
Cuando la revelación no era aún completa Dios dio, en ocasiones, mediante sueños, instrucciones o mensajes proféticos a los suyos e incluso a personas que no lo conocían. Estos sueños parecen haber llevado consigo las marcas de su origen divino. Dios habló de esta manera:
- a Abimelec (
Gn. 20:3 ); - a Jacob (
Gn. 28:12 ;31:10 ); - a Labán (
Gn. 31:24 ); - a José (
Gn. 37:5 ,9 ,10 ,20 ); - al copero y al panadero de Faraón (
Gn. 40:5 ); - al mismo Faraón (
Gn. 41:7 ,15 ,25 ,26 ); - a Salomón (
1 R. 3:5 ); - a Nabucodonosor (
Dn. 2:1 ,4 ,36 ;4:1 ,2 ); - a Daniel (
Dn. 7:1 ); - a José, el prometido de María (
Mt. 1:20 ); - a los magos (
Mt. 2:12 ).
El poder de interpretar de manera precisa los sueños proféticos fue otorgado a ciertos privilegiados:
- A José (
Gn. 41:16 ), - a Daniel (
Dn. 2:25-28 ,47 ).
Los sueños que contenían revelaciones eran sometidos a criterios que desvelaban su naturaleza. Si eran sueños inmorales, eran declarados falsos; el que, mediante sueños, tratara de apartar a Israel del culto a Jehová, debía ser muerto (
Los egipcios, asirlos y babilonios atribuían a los sueños una gran importancia, y había entre ellos profesionales dedicados a su interpretación (