(heb. «Sõ'an», del egip. «D'n.t»).
Ciudad egipcia al este del Delta, sobre la rama tanítica del Nilo, cerca del 31° de latitud norte. Construida siete años después de Hebrón, que ya existía en tiempos de Abraham (Nm. 13:22), Zoán existía ya en la época de la VI dinastía. Los primeros reyes de la XII dinastía hicieron de ella su capital para detener las invasiones provenientes del este. Los hicsos fortificaron Zoán, que vino también a ser su capital, dándole el nombre de Avaris (véase HICSOS). Después de la expulsión de los hicsos, Zoán fue descuidada, y luego restaurada por Seti I. Avaris, conocida más tarde como Tanis, fue el centro del culto al dios egipcio Seth. El sucesor de Seti I, Ramsés II, prosiguió la restauración de Zoán, estableciendo su residencia muy cerca de ella, en Per-Re'emasese, es decir, la ciudad de Ramsés. (Véase RAMESÉS.) Moisés y el faraón del Éxodo se encontraron en Zoán (Sal. 78:12, 43). Entre la época de Isaías y la de Ezequiel, los asirios se apoderaron de Zoán (Is. 19:11, 13; cfr. 30:4; Ez. 30:14). Los griegos le dieron el nombre de Tanis. Para detalles cronológicos, véase RAMESÉS.