Explicación, estudio y comentario bíblico de Eclesiastés 7:21-23 verso por verso
No prestes atención a todas las cosas que se dicen, no sea que oigas a tu siervo que habla mal de ti.
Pues tu corazón sabe que muchas veces tú también has hablado mal de otros.
Todas estas cosas he probado con la sabiduría y dije: “Me he de hacer sabio”. Pero ella estaba lejos de mí.