Explicación, estudio y comentario bíblico de Ester 2:12-17 verso por verso
Cuando llegaba el turno a cada una de las jóvenes para venir al rey Asuero, después de haber estado doce meses sujetas a lo establecido para las mujeres (porque así se cumplía su tratamiento cosmético, es decir, seis meses con aceite de mirra y seis meses con perfumes y ungüentos para mujeres),
así es como la joven venía al rey. Todo lo que ella pidiera se le daba para llevarlo consigo del harén a la casa del rey.
Ella iba al anochecer, y a la mañana siguiente volvía al segundo harén bajo el cuidado de Saasgaz, eunuco del rey, guardián de las concubinas. No volvía a ir al rey, salvo si el rey la deseaba y era llamada por nombre.
Cuando a Ester hija de Abijail, tío de Mardoqueo, a la que este había tomado como hija, le llegó el turno para ir al rey, ninguna cosa pidió aparte de lo que dispuso Hegai, eunuco del rey, guardián de las mujeres. Así Ester obtenía gracia ante los ojos de todos los que la veían.
Ester fue llevada al rey Asuero, a su palacio real en el mes décimo, el mes de Tebet, del séptimo año de su reinado.
El rey amó a Ester más que a todas las mujeres, y ella halló gracia y favor delante de él más que todas las demás jóvenes vírgenes. Él puso la corona real sobre su cabeza y la proclamó reina en lugar de Vasti.