Explicación, estudio y comentario bíblico de Éxodo 13:17-21 verso por verso
Cuando el faraón dejó ir al pueblo, Dios no lo guió por el camino de la tierra de los filisteos, aunque era más corto, porque dijo el SEÑOR: “No sea que al enfrentarse con la guerra, el pueblo cambie de parecer y se vuelva a Egipto”.
Más bien, Dios hizo que el pueblo diera un rodeo por el camino del desierto hacia el mar Rojo. Los hijos de Israel salieron de la tierra de Egipto armados.
Moisés tomó también consigo los restos de José, quien había hecho jurar a los hijos de Israel diciendo: “Ciertamente Dios los visitará, y harán llevar de aquí mis restos, con ustedes”.
Salieron de Sucot y acamparon en Etam, al borde del desierto.
El SEÑOR iba delante de ellos, de día en una columna de nube para guiarlos por el camino, y de noche en una columna de fuego para alumbrarles, a fin de que pudieran caminar tanto de día como de noche.