• Éxodo 14:23

    Los egipcios los persiguieron, y entraron en el mar tras ellos con toda la caballería del faraón, sus carros y sus jinetes.

  • Éxodo 14:24

    Aconteció que a eso de la vigilia de la mañana, el SEÑOR miró hacia el ejército de los egipcios, desde la columna de fuego y de nube, y sembró la confusión en el ejército de los egipcios.

  • Éxodo 14:25

    Trabó las ruedas de sus carros, de modo que se desplazaban pesadamente. Entonces los egipcios dijeron: “¡Huyamos de los israelitas, porque el SEÑOR combate por ellos contra los egipcios!”.

  • Éxodo 14:26

    Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: “Extiende tu mano sobre el mar, para que las aguas vuelvan sobre los egipcios, sobre sus carros y sobre sus jinetes”.

  • Éxodo 14:27

    Moisés extendió su mano sobre el mar, y cuando amanecía, este volvió a su lecho, de modo que los egipcios chocaron contra él cuando huían. Así precipitó el SEÑOR a los egipcios en medio del mar.

  • Éxodo 14:28

    Las aguas volvieron y cubrieron los carros y los jinetes, junto con todo el ejército del faraón que había entrado en el mar tras ellos. No quedó de ellos ni uno solo.

  • Éxodo 14:29

    Pero los hijos de Israel caminaron en seco por en medio del mar, teniendo las aguas como muro a su derecha y a su izquierda.

  • Éxodo 14:30

    Así libró el SEÑOR aquel día a Israel de mano de los egipcios. Israel vio a los egipcios muertos a la orilla del mar.

  • Éxodo 14:31

    Cuando Israel vio la gran hazaña que el SEÑOR había realizado contra los egipcios, el pueblo temió al SEÑOR, y creyó en él y en su siervo Moisés.

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