Explicación, estudio y comentario bíblico de Ezequiel 13:1-10 verso por verso
Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo:
“Oh hijo de hombre, profetiza contra los profetas de Israel que profetizan. Di a los que solo profetizan lo que hay en sus propios corazones: ‘Escuchen la palabra del SEÑOR.
Así ha dicho el SEÑOR Diosa: ¡Ay de los profetas insensatos que andan tras su propio espíritu, y que nada han visto!
Oh Israel, como zorras entre las ruinas han sido tus profetas.
Ustedes no han subido a las brechas ni han levantado un muro alrededor de la casa de Israel, de modo que pueda prevalecer en la batalla en el día del SEÑOR’.
Ellos ven vanidad y adivinación mentirosa. Dicen: ‘Así dice el SEÑOR’, pero el SEÑOR no los ha enviado. ¡Con todo, esperan que él confirme las palabras de ellos!
¿Acaso no es vana la visión que han visto, y no es mentira la adivinación que han pronunciado? Porque dicen: ‘El SEÑOR dice’, sin que yo haya hablado.
Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Diosa, porque han hablado vanidad y han visto mentira; por eso, he aquí yo estoy contra ustedes, dice el SEÑOR Diosa.
Mi mano estará contra los profetas que ven vanidad y adivinan mentira. Ellos no estarán en el consejo de mi pueblo. No serán inscritos en el registro de la casa de Israel ni volverán al suelo de Israel. Y sabrán que yo soy el SEÑOR Dios.
“Por tanto, porque han extraviado a mi pueblo diciendo: ‘¡Paz!’, cuando no hay paz, y porque mientras él edifica el muro, ellos lo recubren con cal,