Explicación, estudio y comentario bíblico de Ezequiel 14:1-8 verso por verso
Algunos hombres de los ancianos de Israel vinieron a mí y se sentaron delante de mí.
Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo:
“Oh hijo de hombre, estos hombres han erigido sus ídolos en sus corazones y han puesto delante de sus rostros aquello que los hace caer en la iniquidad. ¿Habré yo de ser consultado por ellos?
Por tanto, háblales y diles que así ha dicho el SEÑOR Dios: ‘A cualquier hombre de la casa de Israel que haya erigido sus ídolos en su corazón, que haya colocado delante de su rostro aquello que lo hace caer en la iniquidad, y que luego acuda al profeta, yo el SEÑOR me dignaré responderle como merece la multitud de sus ídolos,
a fin de prender a la casa de Israel en su propio corazón. Porque todos ellos se han apartado de mí por causa de sus ídolos’.
“Por tanto, di a la casa de Israel que así ha dicho el SEÑOR Dios: ‘Arrepiéntanse y vuelvan de sus ídolos; aparten su rostro de todas sus abominaciones.
Porque cualquiera de la casa de Israel, o de los extranjeros que residen en Israel, que se haya apartado de en pos de mí, que haya erigido sus ídolos en su corazón, que haya colocado delante de su rostro aquello que lo hace caer en la iniquidad, y que luego acuda al profeta para consultarle acerca de mí, yo, el SEÑOR, le responderé por mí mismo.
Fijaré mi rostro contra aquel hombre, lo convertiré en señal y refrán, y lo eliminaré de entre mi pueblo. Y sabrán que yo soy el SEÑOR.