Explicación, estudio y comentario bíblico de Ezequiel 34:25-31 verso por verso
“Estableceré con ellos un pacto de paz y haré que desaparezcan de la tierra las fieras dañinas, de modo que habiten seguros en el desierto y duerman en los bosques.
A ellos y a los alrededores de mi colina daré bendición. Haré descender la lluvia a su tiempo; serán lluvias de bendición.
Los árboles del campo darán su fruto y la tierra entregará sus productos. Estarán seguros en su propio suelo, y sabrán que soy el SEÑOR cuando yo rompa las coyundas de su yugo y los libre de mano de los que se sirven de ellos.
Ya no serán más una presa para las naciones ni los devorarán las fieras de la tierra. Habitarán seguros y no habrá quien los espante.
Levantaré para ellos un vergel de paz, y nunca más serán consumidos de hambre en la tierra ni cargarán más con la afrenta de las naciones.
Sabrán que yo, su Dios el SEÑOR, estoy con ellos; y que ellos, la casa de Israel, son mi pueblo, dice el SEÑOR Dios.
Ustedes, ovejas mías, ovejas de mi prado, hombres son, y yo soy su Dios”, dice el SEÑOR Dios.