Explicación, estudio y comentario bíblico de Ezequiel 39:21-29 verso por verso
“Entonces pondré mi gloria entre las naciones, y todas las naciones verán mi juicio que habré hecho y mi poderío que habré impuesto sobre ellas.
De aquel día en adelante sabrá la casa de Israel que yo soy el SEÑOR su Dios.
Las naciones sabrán también que la casa de Israel fue llevada cautiva por causa de su pecado. Porque se rebelaron contra mí, yo escondí de ellos mi rostro y los entregué en mano de sus enemigos; y todos ellos cayeron a espada.
Hice con ellos de acuerdo con su impureza y sus transgresiones, y escondí de ellos mi rostro”.
Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: “Ahora restauraré de la cautividad a Jacob. Tendré misericordia de toda la casa de Israel, y mostraré mi celo por mi santo nombre.
Olvidarán su afrenta y toda la infidelidad con que fueron infieles contra mí, cuando habiten en su tierra en seguridad y no haya quien los espante;
cuando yo los haya hecho volver de los pueblos, los haya reunido de las tierras de sus enemigos, y haya mostrado mi santidad en ellos a vista de muchas naciones.
Y sabrán que soy el SEÑOR su Dios, cuando yo los lleve cautivos entre las naciones y cuando los reúna sobre su tierra sin dejar allá a ninguno de ellos.
No esconderé más de ellos mi rostro, porque habré derramado mi Espíritu sobre la casa de Israel”, dice el SEÑOR Dios.