Explicación, estudio y comentario bíblico de Ezequiel 4:1-8 verso por verso
»Y tú, oh hijo de hombre, toma una tableta de arcilla, ponla delante de ti y graba sobre ella una ciudad: Jerusalén.
Luego pon asedio contra ella, construye contra ella un muro de asedio y levanta contra ella un terraplén. Pon contra ella campamentos y coloca arietes contra ella en derredor.
Y tú, toma una plancha de hierro y ponla como muro de hierro entre ti y la ciudad. Luego afirma tu rostro contra ella, y quedará bajo asedio. Tú la asediarás; es una señal para la casa de Israel.
»Y tú, acuéstate sobre tu costado izquierdo y pon sobre él el pecado de la casa de Israel. Durante el número de días que estarás acostado así, cargarás con su pecado.
Yo te he asignado un número de días equivalente a los años del pecado de ellos: Durante trescientos noventa días cargarás con el pecado de la casa de Israel.
Y cumplidos estos, te acostarás nuevamente sobre tu costado derecho, y cargarás con el pecado de la casa de Judá durante cuarenta días: Te he fijado un día por cada año.
Luego afirmarás tu rostro hacia el asedio de Jerusalén, y con tu brazo descubierto profetizarás contra ella.
He aquí, yo pongo cuerdas sobre ti, y no te podrás dar vuelta de un lado al otro hasta que hayas cumplido los días de tu asedio.