Explicación, estudio y comentario bíblico de Filipenses 3:2-3 verso por verso
¡Guárdense de los perros! ¡Guárdense de los malos obreros! ¡Guárdense de los que mutilan el cuerpo!
Porque nosotros somos la circuncisión: los que servimos a Dios en espíritu, los que nos gloriamos en Cristo Jesús y los que no confiamos en la carne.