Explicación, estudio y comentario bíblico de Filipenses 4:1-7 verso por verso
Así que, hermanos míos, amados y queridos, gozo y corona mía, estén firmes en el Señor, amados.
Ruego a Evodia, y ruego a Síntique que se pongan de acuerdo en el Señor.
Sí, y a ti también, fiel compañero, te pido que ayudes a estas hermanas que lucharon junto conmigo en el evangelio, también con Clemente y los demás colaboradores míos cuyos nombres están en el libro de la vida.
¡Regocíjense en el Señor siempre! Otra vez lo digo: ¡Regocíjense!
Su amabilidad sea conocida por todos los hombres. ¡El Señor está cerca!
Por nada estén afanosos; más bien, presenten sus peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.
Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús.