Explicación, estudio y comentario bíblico de Gálatas 3:20-29 verso por verso
Y el mediador no es de uno solo, pero Dios es uno.
Por consecuencia, ¿es la ley contraria a las promesas de Dios? ¡De ninguna manera! Porque si hubiera sido dada una ley capaz de vivificar, entonces la justicia sería por la ley.
No obstante, la Escritura lo encerró todo bajo pecado para que la promesa fuera dada por la fe en Jesucristo a los que creen.
Pero antes que viniera la fe estábamos custodiados bajo la ley, reservados para la fe que había de ser revelada.
De manera que la ley ha sido nuestro tutor para llevarnos a Cristo, para que seamos justificados por la fe.
Pero, como ha venido la fe, ya no estamos bajo tutor.
Así que, todos son hijos de Dios por medio de la fe en Cristo Jesús
porque todos los que fueron bautizados en Cristo se han revestido de Cristo.
Ya no hay judío ni griego, no hay esclavo ni libre, no hay varón ni mujer; porque todos ustedes son uno en Cristo Jesús.
Y ya que son de Cristo, ciertamente son descendencia de Abraham, herederos conforme a la promesa.