Explicación, estudio y comentario bíblico de Génesis 2:8-17 verso por verso
Y plantó el SEÑOR Dios un jardín en Edén, en el oriente, y puso allí al hombre que había formado.
El SEÑOR Dios hizo brotar de la tierra toda clase de árboles atractivos a la vista y buenos para comer; también en medio del jardín, el árbol de la vida y el árbol del conocimiento del bien y del mal.
Un río salía de Edén para regar el jardín, y de allí se dividía en cuatro brazos.
El nombre del primero era Pisón. Este rodeaba toda la tierra de Havila, donde hay oro.
Y el oro de aquella tierra es bueno. También hay allí ámbar y ónice.
El nombre del segundo río era Guijón. Este rodeaba toda la tierra de Etiopía.
El nombre del tercer río era Tigris, que corre al oriente de Asiria. Y el cuarto río era el Éufrates.
Tomó, pues, el SEÑOR Dios al hombre y lo puso en el jardín de Edén, para que lo cultivara y lo guardara.
Y el SEÑOR Dios mandó al hombre diciendo: “Puedes comer de todos los árboles del jardín;
pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás, porque el día que comas de él, ciertamente morirás”.