Explicación, estudio y comentario bíblico de Génesis 25:21-27 verso por verso
Isaac rogó al SEÑOR por su mujer, que era estéril. El SEÑOR accedió a su ruego, y Rebeca su mujer concibió.
Como los hijos se empujaban dentro de ella, dijo: — Si es así, ¿para qué he de vivir? Ella fue a consultar al SEÑOR,
y el SEÑOR le dijo: — Dos naciones hay en tu vientre, y dos pueblos que estarán separados desde tus entrañas. Un pueblo será más fuerte que el otro, y el mayor servirá al menor.
Cuando se cumplió el tiempo de dar a luz, he aquí que había mellizos en su vientre.
Y salió el primero, rojizo y todo velludo como una túnica de pieles, y llamaron su nombre Esaú.
Después salió su hermano, con su mano asida al talón de Esaú, y llamaron su nombre Jacob. Isaac tenía sesenta años de edad cuando ella los dio a luz.
Los niños crecieron, y Esaú llegó a ser experto en la caza, hombre del campo. Jacob, por su lado, era hombre tranquilo y solía permanecer en las tiendas.