• Hebreos 10:10

    Es en esa voluntad que somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre.

  • Hebreos 10:11

    Todo sacerdote se ha presentado, día tras día, para servir en el culto y ofrecer muchas veces los mismos sacrificios que nunca pueden quitar los pecados.

  • Hebreos 10:12

    Pero este, habiendo ofrecido un solo sacrificio por los pecados, se sentó para siempre a la diestra de Dios,

  • Hebreos 10:13

    esperando de allí en adelante hasta que sus enemigos sean puestos como estrado de sus pies.

  • Hebreos 10:14

    Porque con una sola ofrenda ha perfeccionado para siempre a los santificados.

Continúa después de la publicidad