Explicación, estudio y comentario bíblico de Hebreos 3:11-15 verso por verso
Como juré en mi ira: “¡Jamás entrarán en mi reposo!”.
Miren, hermanos, que no haya en ninguno de ustedes un corazón malo de incredulidad que se aparte del Dios vivo.
Más bien, exhórtense los unos a los otros cada día mientras aún se dice: “Hoy”, para que ninguno de ustedes se endurezca por el engaño del pecado.
Porque hemos llegado a ser participantes de Cristo, si de veras retenemos el principio de nuestra confianza hasta el fin,
entre tanto se dice: Si escuchan hoy su voz, no endurezcan su corazón como en la provocación.