• Hechos 4:29

    Y ahora, Señor, mira sus amenazas y concede a tus siervos que hablen tu palabra con toda valentía.

  • Hechos 4:30

    Extiende tu mano para que sean hechas sanidades, señales y prodigios en el nombre de tu santo Siervo Jesús”.

  • Hechos 4:31

    Cuando acabaron de orar, el lugar en donde estaban reunidos tembló, y todos fueron llenos del Espíritu Santo y hablaban la palabra de Dios con valentía.

  • Hechos 4:32

    La multitud de los que habían creído era de un solo corazón y una sola alma. Ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que todas las cosas les eran comunes.

  • Hechos 4:33

    Con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia había sobre todos ellos.

  • Hechos 4:34

    No había, pues, ningún necesitado entre ellos, porque todos los que eran propietarios de terrenos o casas los vendían, traían el precio de lo vendido

  • Hechos 4:35

    y lo ponían a los pies de los apóstoles. Y era repartido a cada uno según tenía necesidad.

Continúa después de la publicidad