Explicación, estudio y comentario bíblico de Hechos 6:8-15 verso por verso
Esteban, lleno de gracia y de poder, hacía grandes prodigios y milagros en el pueblo.
Y se levantaron algunos de la sinagoga llamada de los Libertos, de los cireneos y los alejandrinos, y de los de Cilicia y de Asia, discutiendo con Esteban.
Y no podían resistir la sabiduría y el espíritu con que hablaba.
Entonces sobornaron a unos hombres para que dijeran: “Le hemos oído hablar palabras blasfemas contra Moisés y contra Dios”.
Ellos incitaron al pueblo, a los ancianos y a los escribas. Y se levantaron contra él, le arrebataron y le llevaron al Sanedrín.
Luego presentaron testigos falsos que decían: — Este hombre no deja de hablar palabras contra este santo lugar y contra la ley.
Porque le hemos oído decir que ese Jesús de Nazaret destruirá este lugar y cambiará las costumbres que Moisés nos dejó.
Entonces, todos los que estaban sentados en el Sanedrín, cuando fijaron los ojos en él, vieron su cara como si fuera la cara de un ángel.