Explicación, estudio y comentario bíblico de Hechos 7:56-58 verso por verso
Y dijo: — ¡He aquí, veo los cielos abiertos y al Hijo del Hombre de pie a la diestra de Dios!
Entonces gritaron a gran voz, se taparon los oídos y a una se precipitaron sobre él.
Le echaron fuera de la ciudad y le apedrearon. Los testigos dejaron sus vestidos a los pies de un joven que se llamaba Saulo.