Explicación, estudio y comentario bíblico de Isaías 13:5-11 verso por verso
El SEÑOR y los instrumentos de su ira vienen de una tierra lejana, del extremo de los cielos, para destruir toda la tierra.
Lamenten, porque cercano está el día del SEÑOR; vendrá como destrucción de parte del Todopoderoso.
Por tanto, todas las manos se debilitarán, y todo corazón humano desfallecerá.
Se llenarán de terror; convulsiones y dolores se apoderarán de ellos. Tendrán dolores como de mujer que da a luz. Cada cual mirará con asombro a su compañero; sus caras son como llamaradas.
He aquí que viene el día del SEÑOR, implacable, lleno de indignación y de ardiente ira, para convertir la tierra en desolación y para destruir en ella a sus pecadores.
Porque las estrellas de los cielos y sus constelaciones no irradiarán su luz. El sol se oscurecerá al salir, y la luna no dará su luz.
“Castigaré al mundo por su maldad, y a los impíos por su iniquidad. Haré que cese la arrogancia de los soberbios, y humillaré la altivez de los tiranos.