Explicación, estudio y comentario bíblico de Isaías 2:5-9 verso por verso
¡Oh casa de Jacob, vengan y caminemos a la luz del SEÑOR!
Ciertamente tú has rechazado a tu pueblo, la casa de Jacob, porque ellos están llenos de costumbres orientales y de adivinos, como los filisteos; y hacen tratos con los hijos de extranjeros.
Su tierra se ha llenado de plata y de oro, y sus tesoros no tienen fin. También su tierra se ha llenado de caballos, y sus carros son innumerables.
Además, su tierra se ha llenado de ídolos. Adoran la obra de sus manos, lo que sus dedos han hecho.
El hombre se ha postrado; el ser humano se ha rebajado. Por tanto, no los perdones.