Explicación, estudio y comentario bíblico de Isaías 21:4-9 verso por verso
Mi mente divaga; el terror se ha apoderado de mí. El anochecer que yo anhelaba se me ha convertido en temblor.
Preparan la mesa, arreglan los asientos, comen y beben. ¡Levántense, oh jefes; saquen brillo a los escudos!
Porque así me dice el Señor: — Anda, pon un centinela que anuncie lo que vea.
Cuando vea carros, parejas de jinetes, gente montada en asnos y gente montada en camellos, escuche él con atención, con mucha atención.
Y el centinela gritó: — Oh Señor, sobre la torre del centinela estoy de pie continuamente de día, y todas las noches estoy apostado en mi guardia.
Y he aquí que esto es lo que viene: ¡Hombres en carros y parejas de jinetes! Después habló y dijo: — ¡Ha caído; ha caído Babilonia! Todos los ídolos de sus dioses fueron rotos contra el suelo.