Explicación, estudio y comentario bíblico de Isaías 24:7-17 verso por verso
Languidece el vino nuevo. Se ha marchitado la vid. Gimen todos los que eran de alegre corazón.
Cesó el regocijo de los tamboriles. Se acabó el bullicio de los que se divierten; cesó el regocijo de la lira.
No beben el vino con canción; el licor es amargo a los que lo beben.
Quebrantada está la ciudad del caos; toda casa se ha cerrado para que nadie entre.
En las calles se oye el lamento por el vino. Todo gozo se oscurece; la alegría de la tierra ha sido desterrada.
En la ciudad ha quedado la desolación. Sus puertas han sido destrozadas con la ruina.
Pues ocurrirá en medio de la tierra, en medio de los pueblos, así como cuando se varea al olivo, y como rebuscos una vez acabada la vendimia.
Estos alzan su voz y cantan gozosos; a la majestad del SEÑOR aclaman desde el occidente.
Por tanto, glorifiquen al SEÑOR en el oriente, y al nombre del SEÑOR Dios de Israel en las costas del mar.
Desde el extremo de la tierra oímos salmos: “¡Gloria al Justo!”. Pero yo dije: ¡Desdichado de mí, desdichado de mí! ¡Ay de mí! Los traidores han traicionado; los traidores han actuado con gran traición.
Terror, fosa y trampa hay contra ti, oh habitante de la tierra.