Explicación, estudio y comentario bíblico de Isaías 30:1-7 verso por verso
“Ay de los hijos rebeldes”, dice el SEÑOR, “por llevar a cabo planes pero no los míos, por hacer libaciones para sellar alianzas pero no según mi Espíritu, añadiendo pecado sobre pecado.
“Ellos parten para descender a Egipto a fin de protegerse bajo la protección del faraón y de refugiarse en la sombra de Egipto; pero a mí no me han consultado.
Pero la protección del faraón se les convertirá en vergüenza; y el refugio de la sombra de Egipto, en afrenta.
Cuando sus magistrados estén en Tanis y sus embajadores lleguen a Hanes,
todos serán defraudados por un pueblo que no les servirá de nada. No los socorrerá ni les traerá provecho, sino solo vergüenza y afrenta”.
Profecía acerca de los animales del Néguev: “Por tierra de tribulación y angustia, de donde provienen la leona y el león, la víbora y la serpiente voladora, ellos llevan sobre los lomos de los asnos sus riquezas, y sobre las gibas de los camellos sus tesoros, hacia un pueblo que no les será de provecho.
Ciertamente los egipcios darán ayuda vana y vacía. Por tanto, he llamado a Egipto: ¡Rahab la inutilizada!