• Isaías 32:2

    Aquel hombre será como un escondedero contra el viento y como un refugio contra la tempestad. Será como corrientes de aguas en tierra de sequedad, como la sombra de un gran peñasco en una tierra sedienta.

  • Isaías 32:3

    Entonces no se cerrarán los ojos de los que ven, y los oídos de los que oyen estarán atentos.

  • Isaías 32:4

    El corazón de los imprudentes entenderá para comprender, y la lengua de los tartamudos hablará con fluidez y claridad.

  • Isaías 32:5

    El vil nunca más será llamado generoso, ni noble, el canalla.

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