Explicación, estudio y comentario bíblico de Isaías 42:18-20 verso por verso
“¡Sordos, oigan; y ciegos, miren para ver!
¿Quién es ciego, sino mi siervo? ¿Quién es sordo, sino mi mensajero que he enviado? ¿Quién es ciego como el emisario y ciego como el siervo del SEÑOR?
Tú ves muchas cosas, pero no las guardas. Los oídos están abiertos, pero nadie escucha.