Explicación, estudio y comentario bíblico de Isaías 65:9-17 verso por verso
Sacaré de Jacob descendencia; y de Judá, al heredero de mis montes. Entonces mis escogidos poseerán la tierra como heredad, y mis siervos habitarán allí.
Sarón será transformada en pastizal para ovejas, y el valle de Acor en lugar de reposo para vacas, para mi pueblo que me ha buscado.
“Pero ustedes, los que abandonan al SEÑOR, los que se olvidan de mi monte santo, los que preparan mesa para la Fortuna y vierten vino mezclado para el Destino,
yo también los destinaré a la espada, y todos ustedes se arrodillarán para el degüello. Porque llamé, y no respondieron; hablé, y no escucharon, sino que hicieron lo malo ante mis ojos y escogieron lo que a mí no me agrada”.
Por tanto, así ha dicho el SEÑOR Dios: “He aquí que mis siervos comerán, pero ustedes tendrán hambre; mis siervos beberán, pero ustedes tendrán sed; mis siervos se alegrarán, pero ustedes serán avergonzados.
He aquí que mis siervos cantarán por el júbilo del corazón, pero ustedes gritarán por el dolor del corazón, y gemirán por el quebrantamiento del espíritu.
Dejarán su nombre como maldición a mis elegidos. El SEÑOR Dios te hará morir, pero a sus siervos llamará con otro nombre.
“Cualquiera que sea bendecido en la tierra será bendecido por el Dios de la verdad, y el que jure en la tierra jurará por el Dios de la verdad. Pues las angustias del pasado habrán sido olvidadas y estarán ya encubiertas a mis ojos.
Porque he aquí que yo creo cielos nuevos y tierra nueva. No habrá más memoria de las cosas primeras, ni vendrán más al pensamiento.