Explicación, estudio y comentario bíblico de Jeremias 1:11-16 verso por verso
Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo: — ¿Qué ves, Jeremías? Y respondí: — Veo una vara de almendro.
Y el SEÑOR me dijo: — Has visto bien, porque yo vigilo sobre mi palabra para ponerla por obra.
Vino a mí la palabra del SEÑOR por segunda vez, diciendo: — ¿Qué ves? Y respondí: — Veo una olla hirviente que se vuelca desde el norte.
Entonces el SEÑOR me dijo: — Del norte se desatará el mal sobre todos los habitantes del país.
Porque he aquí que yo convoco a todas las familias de los reinos del norte, dice el SEÑOR. Ellos vendrán, y cada uno pondrá su trono a la entrada de las puertas de Jerusalén, junto a todos sus muros alrededor y en todas las ciudades de Judá.
Y proferiré mis juicios contra ellos por toda su maldad con que me abandonaron, pues ofrecieron incienso a otros dioses y se postraron ante la obra de sus propias manos.