Explicación, estudio y comentario bíblico de Jeremias 12:12-16 verso por verso
Sobre todos los cerros del desierto han venido los destructores, porque la espada del SEÑOR devora desde un extremo de la tierra hasta el otro. No hay paz para ningún mortal.
Sembraron trigo y segaron espinas. Están exhaustos, pero de nada les aprovecha. Se avergonzarán de sus cosechas, a causa del ardor de la ira del SEÑOR.
Así ha dicho el SEÑOR: — Con respecto a todos mis malos vecinos que atacan la heredad que hice poseer a mi pueblo Israel, he aquí que yo los arrancaré de su tierra. También arrancaré de en medio de ellos a la casa de Judá.
Pero sucederá que después que los haya arrancado, volveré a tener misericordia de ellos y los haré volver cada uno a su heredad, y cada cual a su tierra.
Y sucederá que si con diligencia aprenden los caminos de mi pueblo para jurar en mi nombre, diciendo: “¡Vive el SEÑOR!” (tal como enseñaron a mi pueblo a jurar por Baal), entonces ellos serán edificados en medio de mi pueblo.