• Jeremias 13:1

    Así me ha dicho el SEÑOR: “Ve, compra un cinto de lino, cíñete con él y no lo metas en agua”.

  • Jeremias 13:2

    Entonces compré el cinto, conforme a la palabra del SEÑOR, y me ceñí con él.

  • Jeremias 13:3

    Luego vino a mí la palabra del SEÑOR por segunda vez, diciendo:

  • Jeremias 13:4

    “Toma el cinto que has comprado y que tienes ceñido. Levántate y ve al Éufrates; escóndelo allí, en la hendidura de una peña”.

  • Jeremias 13:5

    Fui, pues, y lo escondí junto al Éufrates, como me había mandado el SEÑOR.

  • Jeremias 13:6

    Y sucedió que después de muchos días el SEÑOR me dijo: “Levántate, ve al Éufrates y toma de allí el cinto que te mandé que escondieras allá”.

  • Jeremias 13:7

    Entonces fui al Éufrates y cavé. Tomé el cinto del lugar donde lo había escondido, y he aquí que el cinto se había podrido y no servía para nada.

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