Explicación, estudio y comentario bíblico de Jeremias 26:2-8 verso por verso
“Así ha dicho el SE — OR: ‘Ponte de pie en el atrio de la casa del SEÑOR y habla todas las palabras que te he mandado que hables, a todos los de las ciudades de Judá que vienen para adorar en la casa del SEÑOR. No omitas ni una sola palabra;
quizás oigan y se vuelvan, cada uno de su mal camino, y yo desista del mal que he pensado hacerles por causa de la maldad de sus obras’.
Les dirás que así ha dicho el SEÑOR: ‘Si no me escuchan para andar en mi ley, la cual he puesto delante de ustedes,
ni escuchan las palabras de mis siervos los profetas que persistentemente les he enviado (a los cuales no han escuchado),
entonces haré a este templo como hice al de Silo y expondré esta ciudad como una maldición ante todas las naciones de la tierra’ ”.
Los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo oyeron a Jeremías hablar estas palabras en la casa del SEÑOR.
Pero sucedió que cuando Jeremías terminó de decir todo lo que el SEÑOR le había mandado que hablara a todo el pueblo, lo apresaron los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo, diciendo: “Irremisiblemente morirás.