Explicación, estudio y comentario bíblico de Jeremias 29:5-14 verso por verso
Edifiquen casas y habítenlas. Planten huertos y coman del fruto de ellos.
Contraigan matrimonio y engendren hijos e hijas. Tomen mujeres para sus hijos y den sus hijas en matrimonio, para que den a luz hijos e hijas. Multiplíquense allí y no disminuyan.
Procuren el bienestar de la ciudad a la cual los hice llevar cautivos. Ruegen por ella al SEÑOR, porque en su bienestar tendrán ustedes bienestar”.
Porque así ha dicho el SEÑOR de los Ejércitos, Dios de Israel: “No los engañen sus profetas que están entre ustedes ni sus encantadores. No presten oído a sus sueños que ellos sueñan.
Pues ellos les profetizan falsamente en mi nombre. Yo no los envié”, dice el SEÑOR.
Porque así ha dicho el SEÑOR: “Cuando según mi dicho se cumplan setenta años para Babilonia, los visitaré con mi favor y les cumpliré mi buena promesa de hacerlos regresar a este lugar.
Porque yo sé los planes que tengo acerca de ustedes, dice el SEÑOR, planes de bienestar y no de mal, para darles porvenir y esperanza.
Entonces me invocarán. Vendrán y orarán a mí, y yo los escucharé.
Me buscarán y me hallarán, porque me buscarán con todo su corazón.
Me dejaré hallar de ustedes, dice el SEÑOR, y los restauraré de su cautividad. Los reuniré de todas las naciones y de todos los lugares a donde los he expulsado, dice el SEÑOR. Y los haré volver al lugar de donde hice que los llevaran cautivos”.