Explicación, estudio y comentario bíblico de Jeremias 3:8-11 verso por verso
Ella vio que precisamente porque la apóstata Israel había cometido adulterio, yo la había despedido y le había dado carta de divorcio. Pero su hermana, la desleal Judá, no tuvo temor; más bien, fue y se prostituyó ella también.
Y sucedió que a causa de que su prostitución le era liviana, se prostituyó con la piedra y con el árbol, y profanó la tierra.
Con todo esto, su hermana, la desleal Judá, no volvió a mí con todo su corazón, sino con falsedad”, dice el SEÑOR.
El SEÑOR me dijo además: “Más justa es el alma de la apóstata Israel que la de la desleal Judá.