Explicación, estudio y comentario bíblico de Jeremias 32:36-41 verso por verso
Ahora pues, así ha dicho el SEÑOR Dios de Israel: “Con todo, en cuanto a esta ciudad de la cual dicen: ‘En mano del rey de Babilonia será entregada por la espada, por el hambre y por la peste’,
he aquí que yo los reuniré de todos los países a los cuales los he expulsado en mi furor, con mi ira y con gran indignación. Los haré volver a este lugar y los haré habitar seguros.
Ellos serán mi pueblo, y yo seré su Dios.
Les daré un solo corazón y un solo camino, a fin de que me teman perpetuamente, para su propio bien y para el bien de sus hijos después de ellos.
Haré con ellos un pacto eterno; no desistiré de hacerles bien. Pondré mi temor en el corazón de ellos, para que no se aparten de mí.
Me regocijaré por causa de ellos al hacerles el bien. Los plantaré en esta tierra con verdad, con todo mi corazón y con toda mi alma”.