Explicación, estudio y comentario bíblico de Jeremias 43:1-7 verso por verso
Aconteció que cuando Jeremías acabó de hablar a todo el pueblo todas las palabras que el SEÑOR, el Dios de ellos, lo había enviado a decirles,
Azarías hijo de Osaías, Johanán hijo de Carea y todos los hombres arrogantes dijeron a Jeremías: — ¡Dices mentiras! No te ha enviado el SEÑOR nuestro Dios, para decir: “No entren a Egipto para residir allí”;
sino que Baruc hijo de Nerías te incita contra nosotros, para entregarnos en mano de los caldeos, a fin de que nos maten o que nos lleven cautivos a Babilonia.
Así que Johanán hijo de Carea, todos los oficiales de los soldados y todo el pueblo no obedecieron la voz del SEÑOR, para quedarse en la tierra de Judá.
Más bien, Johanán hijo de Carea y todos los oficiales de los soldados tomaron a todo el remanente de Judá (los que habían regresado, para residir en la tierra de Judá, de todas las naciones a donde habían sido echados),
a hombres, a mujeres, a niños, a las hijas del rey y a toda persona que Nabuzaradán, el capitán de la guardia, había dejado con Gedalías hijo de Ajicam, hijo de Safán, y también al profeta Jeremías y a Baruc hijo de Nerías.
Entraron en la tierra de Egipto, porque no obedecieron la voz del SEÑOR; y llegaron hasta Tafnes.