Explicación, estudio y comentario bíblico de Jeremias 8:20-22 verso por verso
Ha pasado la siega, se ha acabado el verano, ¡y nosotros no hemos sido salvos!
Quebrantado estoy por el quebranto de la hija de mi pueblo. Estoy enlutado; el horror se ha apoderado de mí.
¿Acaso no hay bálsamo en Galaad? ¿Acaso no hay allí médico? ¿Por qué, pues, no hay sanidad para la hija de mi pueblo?