-
»Si he estorbado los anhelos de los pobres y he hecho desfallecer los ojos de la viuda,
-
si he comido mi bocado yo solo y no ha comido de él también el huérfano
-
(aunque desde mi juventud yo lo crié como un padre, y desde mi nacimiento la guié),
-
si he visto a alguien perecer por falta de vestido o que el necesitado carezca de abrigo,
-
si no me bendijeron sus lomos ni se abrigó con el vellón de mis ovejas,
-
si he alzado mi mano contra el huérfano cuando me vi apoyado en el tribunal,
-
entonces desgájese del hombro mi brazo, y sepárese mi brazo de mi antebrazo.
-
Porque he temido el castigo de Dios contra cuya majestad yo no podría actuar.
Continúa después de la publicidad