• Josué 10:8

    y el SEÑOR dijo a Josué: — No tengas temor de ellos, porque yo los he entregado en tu mano. Ninguno de ellos podrá resistir delante de ti.

  • Josué 10:9

    Después de subir toda la noche desde Gilgal, Josué cayó sobre ellos de repente.

  • Josué 10:10

    El SEÑOR los turbó delante de Israel y los hirió con gran mortandad en Gabaón. Los persiguió por el camino que sube a Bet-jorón y los hirió hasta Azeca y Maqueda.

  • Josué 10:11

    Y sucedió que cuando iban huyendo de los israelitas por la bajada de Bet-jorón, el SEÑOR arrojó desde el cielo grandes piedras sobre ellos, hasta Azeca; y murieron. Fueron muchos más los que murieron a causa de las piedras del granizo, que aquellos a quienes los hijos de Israel mataron a espada.

  • Josué 10:12

    Entonces Josué habló al SEÑOR el día en que el SEÑOR entregó a los amorreos ante los hijos de Israel, y dijo en presencia de los israelitas: “¡Sol, detente sobre Gabaón; y tú, luna, sobre el valle de Ajalón!”.

  • Josué 10:13

    Y el sol se detuvo y la luna se paró, hasta que el pueblo se hubo vengado de sus enemigos. ¿No está escrito esto en el libro de Jaser? El sol se detuvo en medio del cielo, y no se apresuró a ponerse casi un día entero.

  • Josué 10:14

    Nunca hubo un día semejante ni antes ni después de aquel día, cuando el SEÑOR escuchó la voz de un hombre; porque el SEÑOR combatía por Israel.

Continúa después de la publicidad