Explicación, estudio y comentario bíblico de Josué 17:7-13 verso por verso
La frontera de Manasés partía de Aser y se extendía hasta Micmetat que está enfrente de Siquem. La frontera seguía hacia el sur hasta los habitantes de En-tapúaj.
La tierra de Tapúaj era de Manasés, pero Tapúaj misma, que está en la frontera de Manasés, era de los hijos de Efraín.
Luego la frontera descendía hasta el arroyo de Caná. Al lado sur del arroyo, había ciudades de Efraín entre las ciudades de Manasés. El resto de la frontera de Manasés coincidía con la ribera norte del arroyo y terminaba en el mar.
Efraín estaba al sur y Manasés al norte. El territorio de Manasés alcanzaba hasta el mar y limitaba al norte con Aser y al este con Isacar.
Manasés también poseía en el territorio de Isacar y de Aser a Bet-seán y sus aldeas, a Ibleam y sus aldeas, a los habitantes de Dor y sus aldeas, a los habitantes de Endor y sus aldeas, a los habitantes de Taanac y sus aldeas, a los habitantes de Meguido y sus aldeas. La tercera era Nafot.
Sin embargo, los hijos de Manasés no pudieron echar a los habitantes de aquellas ciudades, y los cananeos persistieron en habitar en estas tierras.
Y sucedió que después, cuando los hijos de Israel llegaron a ser más fuertes, sometieron a tributo laboral a los cananeos, pero no los echaron completamente.