Explicación, estudio y comentario bíblico de Juan 11:11-27 verso por verso
Habiendo dicho estas cosas, después les dijo: — Nuestro amigo Lázaro duerme pero voy para despertarlo.
Entonces dijeron sus discípulos: — Señor, si duerme se sanará.
Sin embargo, Jesús había dicho esto de la muerte de Lázaro, pero ellos pensaron que hablaba del reposo del sueño.
Así que luego Jesús les dijo claramente: — Lázaro ha muerto;
y a causa de ustedes me alegro de que yo no haya estado allá para que crean. Pero vayamos a él.
Entonces Tomás, que se llamaba Dídimo, dijo a sus condiscípulos: — Vayamos también nosotros para que muramos con él.
Cuando llegó Jesús, halló que hacía ya cuatro días que Lázaro estaba en el sepulcro.
Betania estaba cerca de Jerusalén, como a tres kilómetros,
y muchos de los judíos habían venido a Marta y a María para consolarlas por su hermano.
Entonces, cuando oyó que Jesús venía, Marta salió a encontrarlo pero María se quedó sentada en casa.
Marta le dijo a Jesús: — Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.
Pero ahora también sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará.
Jesús le dijo: — Tu hermano resucitará.
Marta le dijo: — Yo sé que resucitará en la resurrección en el día final.
Jesús le dijo: — Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá.
Y todo aquel que vive y cree en mí no morirá para siempre. ¿Crees esto?
Le dijo: — Sí, Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que había de venir al mundo.