• Juan 13:2

    Durante la cena, como el diablo ya había puesto en el corazón de Judas hijo de Simón Iscariote que lo entregara,

  • Juan 13:3

    y sabiendo Jesús que el Padre había puesto todas las cosas en sus manos y que él había salido de Dios y a Dios iba,

  • Juan 13:4

    se levantó de la cena; se quitó el manto y, tomando una toalla, se ciñó con ella.

  • Juan 13:5

    Luego echó agua en una vasija y comenzó a lavar los pies de los discípulos y a secarlos con la toalla con que estaba ceñido.

  • Juan 13:6

    Entonces llegó a Simón Pedro y este le dijo: — Señor, ¿tú me lavas los pies a mí?

  • Juan 13:7

    Respondió Jesús y le dijo: — Lo que yo hago tú no lo entiendes ahora pero lo comprenderás después.

  • Juan 13:8

    Pedro le dijo: — ¡Jamás me lavarás los pies! Jesús le respondió: — Si no te lavo no tienes parte conmigo.

  • Juan 13:9

    Le dijo Simón Pedro: — Señor, entonces, no solo mis pies sino también las manos y la cabeza.

  • Juan 13:10

    Le dijo Jesús: — El que se ha lavado no tiene necesidad de lavarse más que los pies pues está todo limpio. Ya ustedes están limpios, aunque no todos.

  • Juan 13:11

    Porque sabía quién lo entregaba por eso dijo: “No todos están limpios”.

  • Juan 13:12

    Así que, después de haberles lavado los pies, tomó su manto, se volvió a sentar a la mesa y les dijo: — ¿Entienden lo que les he hecho?

  • Juan 13:13

    Ustedes me laman Maestro y Señor y dicen bien, porque lo soy.

  • Juan 13:14

    Pues bien, si yo, el Señor y el Maestro, lavé sus pies, también ustedes deben lavarse los pies los unos a los otros.

  • Juan 13:15

    Porque ejemplo les he dado para que, así como yo se los hice, ustedes también lo hagan.

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