Explicación, estudio y comentario bíblico de Juan 19:35-43 verso por verso
El que lo ha visto ha dado testimonio, y su testimonio es verdadero. Él sabe que dice la verdad para que ustedes también crean.
Porque estas cosas sucedieron así para que se cumpliera la Escritura que dice: Ninguno de sus huesos será quebrado.
También otra Escritura dice: Mirarán al que traspasaron.
Después de esto, José de Arimatea, que era discípulo de Jesús aunque en secreto por miedo a los judíos, pidió a Pilato que le permitiera quitar el cuerpo de Jesús. Pilato se lo permitió. Por tanto, él fue y llevó su cuerpo.
También Nicodemo, que al principio había venido a Jesús de noche, fue llevando un compuesto de mirra y áloes como de treinta y cuatro kilos.
Tomaron, pues, el cuerpo de Jesús y lo envolvieron en lienzos con las especias, de acuerdo con la costumbre judía de sepultar.
En el lugar donde había sido crucificado había un huerto, y en el huerto había un sepulcro nuevo en el cual todavía no se había puesto a nadie.
Allí, pues, por causa del día de la Preparación de los judíos y porque aquel sepulcro estaba cerca, pusieron a Jesús.