Explicación, estudio y comentario bíblico de Juan 20:2-13 verso por verso
Entonces corrió y fue a Simón Pedro y al otro discípulo a quien amaba Jesús, y les dijo: — Han sacado al Señor del sepulcro y no sabemos dónde lo han puesto.
Salieron, pues, Pedro y el otro discípulo e iban al sepulcro.
Y los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corrió más rápidamente que Pedro y llegó primero al sepulcro.
Y cuando se inclinó, vio que los lienzos habían quedado allí; sin embargo, no entró.
Entonces llegó Simón Pedro siguiéndolo y entró en el sepulcro. Y vio los lienzos que habían quedado,
y el sudario que había estado sobre su cabeza no puesto con los lienzos sino doblado en un lugar aparte.
Entonces entró también el otro discípulo que había llegado primero al sepulcro, y vio y creyó.
Pues aún no entendían la Escritura, que le era necesario resucitar de entre los muertos.
Entonces los discípulos volvieron a los suyos.
Pero María Magdalena estaba llorando fuera del sepulcro. Mientras lloraba, se inclinó hacia dentro del sepulcro
y vio a dos ángeles con vestiduras blancas que estaban sentados, el uno a la cabecera y el otro a los pies donde había sido puesto el cuerpo de Jesús.
Y ellos le dijeron: — Mujer, ¿por qué lloras? Les dijo: — Porque se han llevado a mi Señor y no sé dónde lo han puesto.