Explicación, estudio y comentario bíblico de Juan 3:17-18 verso por verso
Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo sino para que el mundo sea salvo por él.
El que cree en él no es condenado; pero el que no cree ya ha sido condenado porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.