Explicación, estudio y comentario bíblico de Juan 7:24-36 verso por verso
No juzguen según las apariencias sino juzguen con justo juicio.
Decían entonces algunos de Jerusalén: — ¿No es este a quien buscan para matarle?
¡He aquí, habla públicamente y no le dicen nada! ¿Será que los principales realmente han reconocido que él es el Cristo?
Pero este, sabemos de dónde es; pero cuando venga el Cristo nadie sabrá de dónde sea.
Entonces Jesús alzó la voz en el templo, enseñando y diciendo: — A mí me conocen y saben de dónde soy. Y yo no he venido por mí mismo; más bien, el que me envió, a quien ustedes no conocen, es verdadero.
Yo lo conozco, porque de él provengo y él me envió.
Entonces procuraban prenderle, pero nadie puso su mano sobre él porque todavía no había llegado su hora.
Muchos del pueblo creyeron en él y decían: “Cuando venga el Cristo, ¿hará más señales que las que hizo este?”.
Los fariseos oyeron que la multitud murmuraba estas cosas acerca de él, y los principales sacerdotes y los fariseos enviaron guardias para tomarlo preso.
Entonces dijo Jesús: — Todavía estaré con ustedes un poco de tiempo; luego iré al que me envió.
Me buscarán y no me hallarán, y a donde yo estaré ustedes no podrán ir.
Entonces los judíos se decían entre sí: — ¿A dónde se ha de ir este, que nosotros no lo hallemos? ¿Acaso ha de ir a la dispersión entre los griegos para enseñar a los griegos?
¿Qué significa este dicho que dijo: “Me buscarán y no me hallarán, y no podrán ir a donde yo estaré”?